Sobre las máquinas en Japón

Como en todas partes, Japón tiene cosas buenas y cosas malas (y no pocas) pero una de las cosas que realmente llaman la atención a los visitantes primerizos, es lo acostumbrados que estamos todos los habitantes de este País a que todas las máquinas funcionen. Da igual si usas una máquina de bebidas en un pueblo perdido, una escalera eléctrica en un centro comercial, los tornos para pasar a los andenes del metro, las máquinas expendedoras de tickets, lo que sea… todo, siempre funciona a la perfección. Es curioso porque la mayoría de máquinas, sobre todo las expendedoras de billetes, tampoco es que tengan un aspecto demasiado bueno (queda algo como entre antiguo y moderno pero desgastadas por el uso), pero absolutamente todas funcionan sin una sola pega. A veces, se estropean, y entonces hay un operario japonés arreglándola, como en la foto de abajo de la estación de metro de Hanzoumon (半蔵門駅), pero hasta ahora jamás he podido encontrar una máquina que no funcione y que no tenga un operario reparándola, sea Domingo o cualquier otro festivo.