Soy una persona muy nostálgica. Siempre añoro los días vividos en el pasado, y aunque me gusta también mirar al frente, no puedo evitar volver siempre sobre mis pasos a los lugares en los que he vivido en el pasado, ya sean pisos en donde me alojé, lugares que me gustaron viajando, o simplemente el lugar en el que trabajaba en empresas anteriores. Especialmente en Japón, tengo muchos recuerdos repartidos por todo el país y nunca me canso de visitar de nuevo lugares que ya considero un poco míos, porque partes de importantes de mi vida ocurrieron ahí. Estos lugares están llenos de esas pequeñas cosas de la vida que hacen que tenga sentido, y también hacen que quiera volver por esa misma razón. Puede ser un café que me tomé un día sentado en un banco del parque al lado de mi casa mientras veía cómo se movían las hojas de los árboles, a través de las que pasaba el sol del atardecer. Puede ser ver llegar uno de los barcos que recorren el río Sumida hasta Odaiba, o ver despegar un avión desde Haneda con muchos barcos entrando y saliendo de la bahía de Tokio en primer plano. Estos son sólo algunos ejemplos de momentos que recuerdo, pero para mi Japón (y otros países como el Reino Unido, Francia o España por supuesto) está lleno de ellos. Puede ser algo muy sutil como la melodía de la megafonía de una estación de tren, o puede ser el lugar en el que firmé la compra de mi casa. Pueden ser muchas pequeñas cosas muy diferentes, que marcan los hitos de mi vida.
Basándome en esta premisa de las pequeñas cosas de la vida, hoy este blog toma un nuevo rumbo y enfoque con una idea que hace varios meses que me ronda la cabeza y que he estado preparando poco a poco. Hace ya un tiempo, publiqué en Twitter un vídeo de un viaje en tren, en la línea Keikyu saliendo de Shinagawa hacia la zona de Kawasaki y Yokohama. Es el tren que he estado varios años tomando para ir a trabajar todos los días, y me trajo mucha nostalgia. Me gusta ver ese vídeo una y otra vez, y he llegado a recorrer ese mismo trayecto aunque ya no trabajo ahí, simplemente, porque me gusta disfrutar la nostalgia de recorrer esas cases como en años atrás, ver las cosas que han cambiado, etc.
Nunca pensé que esto que me ocurre a mi, podría ser interesante para nadie más. Pero parece que estaba equivocado. Me llegaron en ese tuit (que no enlazo porque no soy capaz de encontrarlo) contestaciones de muchos vídeos de YouTubers que publican simplemente eso… trayectos en tren, paseos por diferentes ciudades… grabaciones de sus pasos por lugares que sorprendentemente resultaron ser muy relajantes para mi. Me aficioné a ver esos vídeos, y hoy en día la mayor parte de mi tiempo en YouTube lo paso viendo este tipo de contenidos. Fue una sorpresa ver que muchas personas piensan que es divertido caminar por una calle de Tokio en la lluvia, sin más, viendo pasar el tiempo, escuchando cómo cae el agua y observando los edificios y la gente. Es este ambiente una de las primeras cosas que me engancharon al venir a Japón por primera vez, simplemente encaja conmigo y me hicieron sentir que éste era mi lugar, mucho más que cualquier otro país que haya visitado antes, que me ha gustado también, pero que no ha tenido ese componente personal que siempre ha tenido Japón para mi.
Por esta razón, empezó a rondar por mi cabeza hacer algo así, grabar mis paseos, compartir mis pequeños momentos de la vida con la esperanza de que alguno de ellos también sea importante para otra persona. Para hacerlo, he cambiado el diseño a este blog, que ya le hacía falta, y en él destaco ahora mis vídeos de paseos, en una cuenta de YouTube en la que ya tengo publicados un buen número de vídeos y a la que, si te gusta, espero que quieras suscribirte y recibir notificaciones cada vez que publico un vídeo (¡esa campanita! )
La verdad es que nunca pensé antes en hacer algo así, pero he de reconocer que he disfrutado cada paso que he dado grabando estos vídeos de paseos, o vídeos en los que simplemente me paso un rato viendo el panorama, o vídeo cómo llueve en un santuario, sin más. Uno de esos pequeños momentos de la vida que me gusta disfrutar con detenimiento, y que ahora puedo repetir gracias a estos vídeos.
El vídeo que grabé inmediatamente después de este momento, también es muy especial para mi… y eso que no me gusta mucho la llluvia
Estos vídeos, por cierto, son lugares que son especiales para mi porque he vivido ahí, o he pasado un tiempo en ese lugar… son vídeos, como este blog, personales. Los comparto pero probablemente en alguno de ellos cuando me fije en un edificio concreto, no sabréis por qué… aunque yo sí
En mi canal de YouTube podréis encontrar todos estos vídeos, grabados siempre como mínimo en resolución 4K y algunos también a resolución 5K, o incluso 8K en el caso de los vídeos 360º, de los que aún tengo que encontrar tiempo para procesar y publicar porque son increíblemente pesados y a mi ordenador le cuesta un poco tragarlos. Estos vídeos los puedes ver con un smarpthone, y al moverte físicamente elegir dónde quieres mirar exactamente. También puedes utilizar el dedo para mover la cámara, o incluso utilizar unas gafas de realidad virtual como las de PlayStation para elegir dónde mirar con tu propia cabeza, como si estuvieras allí. En un ordenador, puedes usar también el ratón para ver. Aquí tienes uno de estos vídeos en una de mis visitas al Sensou-ji de Asakusa.
Espero que os gusten mis vídeos, y que como a mi, os fascinen esas calles japonesas sin montones de coches aparcados a los lados que ahora puedes disfrutar en estos vídeos, en alta resolución, y con un audio que he intentado cuidar, utilizando micrófonos cardioides muy sensibles especialmente preparados para captar sonido ambiental con mucho detalle y una grabadora profesional. En algunos vídeos es posible escuchar mi propia respiración, porque es lo que tiene pasear con mascarilla y grabar con unos micrófonos tan sensibles, pero poco a poco intentaré ir mejorando mis videos y con ellos la calidad del audio.