Estaba de camino al trabajo esta misma mañana, y entre la gente ha entrado una chica con un Mac (en concreto un iBook G3) en la mano. Debe ser que estaba trabajando en el anden, y cuando vino el metro no se podía sentar así que se quedó una estación tal cual la veis en la foto.
Mis intuiciones no eran infundadas. Tan pronto se sentó se puso a trabajar con el portátil tal cual lo traía en la mano. Lo más curioso, es que a nadie parecía sorprenderle la situación. Simplemente me sorprendió ver a alguien utilizando un portátil, y un Mac, en medio de la gente, de pie, sin que aparentemente a nadie le parezca extraño.
Si esto no fuera Japón me daría mucho miedo sacar algo tan caro delante de todos, las probabilidades de que alguien llegue y me lo quite de las manos para salir corriendo con él, son demasiado altas. Pero aquí en Japón no hay problema. Es una de las cosas que más me gustan de este país, la seguridad que se respira prácticamente en cualquier lugar. Ojalá fuera así en todas partes.
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